El afeitado diario reseca la piel y provoca microcortes en el rostro. Por eso, tras el rasurado conviene aplicar un producto que hidrate y refresque la piel, calme la irritación y facilite la cicatrización de las heridas.
Contiene Caléndula (efectos antisépticos, desinfectantes y cicatrizantes), Alantoina (actúa en la reparación y regeneración de sus tejidos y acelera la curación de las heridas), Manzanilla (propiedades descongestiva, calmante), Germen de Trigo (propiedades revitalizantes del tejido cutáneo y restaura su textura y elasticidad) y Frescolat (tiene la capacidad para vigorizar y activar la circulación).
Refrescante profundo de efecto prolongado.